El mundo se ha puesto complicado
Cuando el ejército rojo Japonés, de la mano de su líder Kōzō Okamoto atacó al avión israelí de El –AL provocando una veintena de muertos, nada hizo presuponer que el grupo actuaba en forma coordenada con el Frente popular para la liberación de Palestina, de George Habash, ex OLP , actual brazo armado independiente pro sirio comandado por Abú Alí Mustafá. A pesar de los esfuerzos denodados del líder moderado Iasser Arafat, una desatada línea fundadora, de su creación, “ Al Fataj”, provocó uno de los mayores desastres en Munich, bajo el seudónimo occidental de “ Septiembre Negro”. Lo que siguió a esta tensa calma fue, un sinfín de represarías que desembocó en el conflicto armado de Iom Kippur en 1973.
Consolidado efectivamente el conflicto, estuvo una década huérfano del arbitrio de las grandes potencias. Uno de los USA, por el nacionalismo panarabista de Nasser en Egipto, el otro la URSS que veía en los palestinos un liderazgo indómito que no provenía de una fuente comunista, a pesar de la insistencia de Moscú en pertrecharse gratuitamente para el altercado…Aprovechando estas circunstancias de “ vacío legal “, un envalentonado Moshé Sharet, sometió al frente musulmán druso palestino de izquierda en el Líbano, arrasando Beirut y a todas las madrigueras de la OLP en el exilio. A tiempo de alcanzar la cifra record de cien mil unidades en la región, Israel le dio carta franca a las falanges cristianas de Bashir Gemayel para aplastar los campamentos de refugiados de palestinos: Sabra y Shatila. Como saldo colateral, un leve daño a la imagen pública internacional, y un reto disciplinario al por entonces ministro de defensa Ariel Sharon. De este caldo de sucesos, sumado a la vinculación teológico-política con la revolución Iraní, surgió el partido político-militar de Hassan Nasralla :” C4 Hezbollá”. Una vez que esta agrupación asestó un brutal golpe de piedras a la escuadra de tanques Merkava, a tiempo de un insurgimiento popular denominado Intifada, dio paso a la creación desde la propia Palestina, a la organización político-religiosa sin fines de lucro denominada Hamas, o Movimiento de resistencia Islámico moderado. Comprometidos todos los acuerdos de paz posibles en la región, dado que en su plataforma fundacional alude a “ no ceder ni un palmo de tierra musulmana”, y en la otra vereda se esgrime el concepto de “ Eretz Israel “ o Reino de Israel, O sea los territorios descriptos del antiguo testamento, que equivaldría en la práctica, a todo el mundo menos el Egipto de Ramses II. Caído el muro de Berlín, sin el amparo de la ex Unión Soviética, el gobierno palestino entró en un acuerdo con el primer ministro Itzjak Rabin, debidamente orquestado por el “ Nuevo Orden Internacional” vigente de George Bush, a su salida exitosa en el incidente de Saadam Hussein en Kuwait. Dicho acuerdo, a la muerte del primer ministro en manos de la derecha israelí de Ariel Shaaron y Benjamin Netaniahu, duró lo que un pedo en un canasto, al modificarse el status quo favorable, al nacionalismo semita. De pretendida asunción al compromiso de desocupar los territorios de Gaza y Cisjordania, unos colonos que son la punta de lanza del expansionismo sionista frenan de por vida todo inicio de negociaciones. Los amigos de la Jihad islámica, responden con atentados suicidas dentro del territorio de” Israel “, como réplica, debidas hordas de represalia en forma de bombardeo, destruyen los pocos hospitales y escuelas todavía en pie dentro de la franja. Embanderados en estas causas pro-árabes, grupos extremistas se hacen eco del dolor palestino, y atentan contra objetivos occidentales en la diáspora, Al Gamma Al i Slamiyya, desde el Egipto pro-occidente, la brigada Izz El Din Al Qassan, brazo fuerte de Hamas, y el propio Al Qaeda, que promueve el califato Pan-islámico en el mundo. Si no cuajan en una organización de proporciones, es al debido enfrentamiento sunita-chiíta, que habita en el seno del mundo árabe, y del cual la administración del “ águila “, a tomado la debida nota.
Esteban Silva
Pedro Brieguer: Muchas gracias por el escrito Esteban, aunque debo decirte que Okamoto
ResponderEliminarno atacó ningún avion sino el aeropuerto de Lod en Israel