Amigo 2

Amigo 2

Lavalle al 600, día de semana, 15:30 para más datos. Acabo de salir de una casa de jugos. Pedí un “ hawaiano”, un tutti-frutti, bah…
Regreso de una compra frustrada de mercado libre. Esas de las que te acercas al producto y ves la diferencia con la imagen “ idealizada” de internet.
Doy las primeras chupadas a la pajita, ( demasiado fina para la viscosa solución, pensé)
Apuro el paso por el lateral para mostrarme decidido, ocupado, y así sortear los habituales tarjeteros de “tugurios” de la zona, que normalmente abordan a los hombres solos que pasean por la peatonal.
Al frente, en mi misma dirección ,una chica de escasos diecisiete años se aproxima empujando un carrito de bebé. En su mano derecha, un cigarro prestes a terminarse.
Camiseta de la selección Argentina anudada a la altura del ombligo, pantalones de gimnasia a tono. Flequillo tipo “ rolinga”, pelo atado atrás con colita.
- Amigo, ¿no tené una moneda?-
-No.- ( Meditando en un nanosegundo la situación)
- ¿No me dá un traguito?-
- …- ( maniobra evasora sorteando, la sostenida charla)
- ¡Ortiba!-
-¡Botón!-
-¡Gato!- ( un linyera que observaba el trance, e intervenía subrepticiamente)
Lo usual pensé, nada original.
Lesson number one: “ Si me venís a manguear algo, tratá de que sea sin un pucho en la mano” ( Esteban dixit )
Y continué la entretenida marcha, animada ahora por las tiendas de “ cueros” y “ cuchillos”, que tanto me gustan.

Esteban Silva