sábado, 30 de abril de 2011

El Arrebatador de Mamushkas Inadecuadas



Hay dos tipos de Mamushkas.
Las adecuadas, que despliegan sus intenciones en una escalera de tamaños y las inadecuadas que encapsulan sus propósitos en su interior.
El arrebatador solo va por estas últimas.
A simple vista pasa por un inmigrante eslavo. Alto de ojos celestes y pelo rubio, comúnmente se lo ve merodear por las ferias de anticuario.
Posee un ojo avizor que detecta la maniquea maqueta maquiavélica de morondanga.
Nada lo detiene en su empeño al oriundo de Kazajstán.
Su paso firme y sincronizado. Su mirada adusta y severa.
Una barba de tres días completa el disfraz junto un piloto color caqui, que utiliza para consumar el acto delictivo.
El ex KGB, ve en esas cápsulas de madera siglos de opresión zarista.
La Guerra fría, Stalin, el Gulag, la revolución Bolchevique, los Zares, los cosacos…
Un síntoma post-traumático. Un alto nivel de ansiedad movilizan a la maquinaria bélica que hay en su interior.
Entrenada para ejercer un oficio. Hoy desactivado.
Como el galpón de artes gráficas donde vive, en el barrio de la Boca.
Y en donde al calor de una hoguera, destruye los fetiches, intentando olvidar su pasado.

Esteban Silva

2 comentarios:

  1. Noten el ritmo: da gusto leerlo.
    Pura asociación libre. Puro simbolismo. Pura síntesis. Pura potencia.

    Es impresionante la evolución que estás teniendo, Esteban.

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  2. Querido! te felicito. Vos tenes un talento enorme a la hora de los cuentos y ficciones. Te lo dije en su momento, te dije también que le dieras para adelante con el blog cuando recuerdo me preguntabas si valía la pena que abrieras uno.
    Ahora con esto que contas no sólo no me sorprende sino creo que es justo y merecido.

    Un beso o 2 #
    Y mis: admiración, dosis de buena energía y cariño de siempre.

    O make me a mask #
    Eleanor Smith #

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