Ensayitos

La vivienda Unifamiliar/ Previsiones de un desarrollo evolutivo posible.


Con el paso de del tiempo, el hombre ha dado distintas respuestas a la necesidad de hábitat en distintos entornos, tanto habitables como no, este se las ingenia para recurrir en los materiales del lugar, las formas más adaptables, el aprovechamiento de los recursos etc. Ha habido un gran salto en las técnicas constructivas del siglo XIX al XX, y lo que va de este siglo. Pero también hubo un gran estancamiento en lo que se refiere al programa intrínseco del desarrollo estructural e individual de la vivienda y su conjunto, por verse ésta sujeta a los designios del creacionismo artístico e individual del proyecto “ a medida”. Si comparamos, en los albores del siglo pasado el automóvil, industria incipiente, y el tipo de vivienda que por entonces imperaba veríamos que no distaban en tecnología, mucho uno de otro. En algunos aspectos estaban emparentados, las soluciones tecnológicas de la revolución industrial se aplicaban en uno y otro campo, resultando una simbiosis de ambos en aquellos tiempos. Pero con la era moderna, la tecnología y la ciencia avanzaron a pasos exponenciales transformando, el entorno, las ciudades y todas las obras de envergadura, no así, la vivienda unifamiliar que si bien incorporó algunos adelantos del “progreso Constructivo”, no fundamentó su evolución en la metodización industrializada de la línea de montaje, sino en la formalidad creativa del gusto temporal, adaptando en forma lenta y progresiva los nuevos materiales y técnicas. Lo que quiero decir es: “ le ville Savoige” de 1930, de Le-Corbusier podría ser tranquilamente, en programa, y métodos constructivos una vivienda de la actualidad. No sucedería lo mismo si comparamos con cualquier producto automotriz de la época, difícilmente se adaptaría a la actualidad, por eficiencia y prestaciones, básicamente. Como es que el automóvil, el avión, el tren, las máquinas en general que hacen nuestro bienestar, se hicieron eficientes?. Que beneficios obtuvieron de la “ línea de montaje”. No olvidemos que para el inicio de la Era del automóvil co-existían, ambos emprendimientos: Las primeras compañías automotrices y los pequeños emprendedores de proyectos particulares de autos. Rápidamente estos últimos no pudieron competir con los primeros y la industria los absorbió progresivamente. Ahora bien; el desarrollo de la vivienda colectiva e individual, estuvo por lo general bajo las normativas de los códigos de planeamiento para cada región. Todo fue prestablecido por colegiaturas que en cada caso designaron las reglas del cómo, con qué, dónde, de qué manera, de que características debía construirse. En todo caso estas normas visaban la seguridad de lo construido, el hábitat mínimo donde el ser humano se desenvuelve, cierto planeamiento a “ gran escala “ del uso territorial de las diferentes regiones , la calidad y cantidad de los espacios construídos y todas las prerogativas resultantes de estos visados. Con esto no quiero decir, que ante tamañas exigencias la evolución de la vivienda se vió socavada ante la normativa, sino que más bien esta se re dirigió bajo su parámetro, dando como resultante el desarrollo habitacional de hoy día. Pero es fundamental si se piensa en eficiencia, rever estos paradigmas que afectan la evolución de la vivienda, cambiándolos por otros, o permitiendo la coexistencia de ambos, en pro, de adelantos significativos en la calidad economía y preservación de recursos en nuestro planeta. Utopías en lo que se refiere a lo constructivo siempre han existido y existirán, casi siempre verán frenadas sus aspiraciones ante la normativa, la financiación constructiva, más tendiente a exprimir especulativamente el código, que las propuestas superadoras. Por eso , para sortear estas dificultades, de implementación de proyectos a baja y mediana escala, se hará necesario la intervención del Estado para asegurar la prosecución de estos proyectos, con el asesoramientos de todas las áreas científicas a su alcance, dónde el “ proyecto “, sea una parte más del todo, que es lograr el Confort, la eficiencia y la “ Standarización” de la unidad habitacional, en sintonía con los procesos industriales, y las compañías a los que se le encarguen la ejecución de estas “ Unidades”. A priori, solo las automotrices estarían en la carrera de largada si se le comisionaran estos prototipos, pero también podrían concursar o asociarse ,empresas de carrocerías, viviendas industrializadas, navieras de bajo porte, empresas de cerramientos, fabricantes de maquinaria industrial etc. Como en la corriente arquitectónica del Racionalismo, el axioma “ La forma subordinada a la Función “, será el “lei motiv” , que regirá la conceptualización del proceso. La idea en grandes trazos, es partir de una unidad básica habitable, que previamente estará concensuada en medidas de módulos. Sus instalaciones, anclajes, capacidad de resistencia, operatividad, longevidad y cientos de otros parámetros serán especificados y controlados por organismos similares a los que operan en seguridad industrial o normativa de productos. A esta unidad Cero, podría sumárseles módulos adicionales de diversos tipos, dormitorio, sala de estar, escritorio, bio granja, de tareas generales, de almacenamiento , y otros que la propia industria y la experiencia directa encontrarán convenientes. Los módulos a su vez se dispondrán de una manera previamente designada, en silos de aprovisionamiento, estos proveerán los suministros básicos de energía, agua y servicios; instalaciones de equipamiento urbano de baja densidad, plaza, sum ,etc. En estos “ silos “ o columnas de anclaje de las unidades, no habría propiedad privada del uso del terreno, el uso sería colectivo y la densidad sería previamente planificada para hacer de estos conjuntos, lugares de calidad de vida a bajo costo. Podrían conjuntamente incorporarse metas de sustentabilidad, para no solo lograr una mayor eficiencia sino para bajar el canon de arrendamiento del “ anclaje “. La operatoria sería similar a un impuesto inmobiliario conjuntamente con un global de tasa de servicios prestados. En tal caso se podrián ofrecer categorías de anclajes y prestación de servicios diferenciadas, como lo que en la realidad sucede en cada municipio, barrio, o prefectura con las viviendas tradicionales. Serían muchos los beneficios derivados de esta implementación. A escala general, un aprovechamiento integral de los recursos, un ordenamiento y contención del crecimiento pautado, una centralización que permitiría el destino apropiado tanto de los perfiles de usuarios, como las líneas crédito mixtas tanto de los fabricantes como del propio Estado. Una Nivelación primaria en el uso social del espacio, con nuestros vecinos y el entorno. Una tendencia hacia el uso comunitario de las instalaciones. A escala individual, confort con todos los servicios reducidos a un único Canon, Capacidad de trasladar la unidad a otro anclaje o región, lo que facilitaría el acceso a un trabajo de manera peatonal, bicicleta o estratégicamente un medio de transporte público. También facilitaría la afinidad de grupos de pertenencias, lazos familiares y de cualquier índole. Bajo impacto urbano, por las instalaciones eficientes y coordenadas con las políticas de saneamiento urbano de cada municipio. Servicios técnicos especializados en la solución de los fallos técnicos de el equipamiento de las unidades. Capacidad de negociación tanto de los módulos como de la unidad en su conjunto por otras unidades o dinero, como es el caso del mercado inmobiliario y de automotores. Ahora dado que la disponibilidad de terrenos acordes para el emplazamiento de estas unidades, es escaso en las áreas urbanas en principio estos lo harían en sectores abiertos de la periferia de las ciudades, insertándose progresivamente en las ciudades, a través de una legislación pertinente que destinaría obligatoriamente el uso de todo terreno que surja de una demolición, a este emprendimiento que tiende a bajar la densidad habitacional de las ciudades. En principio y en contraste con la actualidad constructiva estos proyectos resultan utópicos o de difícil implementación, por las leyes vigentes, tanto del estado como del sector privado. Pero el paso inicial debe ser dado desde un organismo contralor, para garantizar los resultados y minimizar el impacto. En otras latitudes, ya se implementan, módulos de cocina y baño inyectados en Pvc desde hace varias décadas. Viviendas recicladas de containers Marítimos, están siendo comercializadas a baja escala, pero su implantación es individual. Estas unidades sin dejar de lado la opción de uso individual del espacio, tendrían como objetivo una tendencia a la sociabilidad, la búsqueda de la recreación en espacios abiertos, generados por la Planta baja libre de esta propuesta, aliviando parcialmente la crisis habitacional , como primera opción de moradía, y transformando paulativamente el entorno en pequeños oasis de equilibrio ambiental.