martes, 20 de septiembre de 2011

Recomienzo

¿Cómo saben las lágrimas ocultas?, esas, las que alma le niega a los intrusos.
Interior, hábito exiguo dónde florece el desconsuelo. Echa raíces y se afirma.
Es menester que la voz se alce. La profecía se cumpla. El destino invada.
La quietud turba el desarraigo, lo sabe la desdicha.
Capaz de arrastrar en su océano lo vasto de su fe, imagina paraísos dónde exiliar su ánima. Ahí sola, en el escarceo brioso de su engaño, se reconcilia. Abre sus venas para mitigar su agobio, alucina. Y en el estertor propio de su aliento, recomienza a andar…

Esteban Silva

1 comentario:

  1. "Un día abrió sus venas
    cansada de tanta tristeza
    De ellas salieron flores, mariposas,
    Extrañas músicas
    Entonces lo supo
    Adentro suyo
    Habitaba la felicidad."

    Un beso o 2 #

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