sábado, 1 de febrero de 2014

Conjetura abstracta


En los confines de la vida misma yace un interrogante. De contornos obscuros y abismales.
Es una pregunta retórica, que tiene más de expresión de deseo que de afirmación.
Hay quién la tiñe de ribetes púrpuras e hilos de oro. Y hay quien la piensa transparente o de matices translúcidos. De una u otra forma ninguno de ellos obtiene respuestas.
Apenas conjeturas acomodaticias que sirven de consuelo. Impresiones vagas, atajos inconducentes, remedos.
Por eso el mundo está lleno de teorías. Doctrinas, filosofías caminos a seguir.
Todos pugnan por la recompensa. Cualquiera que sea.
Lo que no saben, es que aquello que nos es dado, persiste por su afán de ser.
Por ni siquiera pensarlo.
Por sí mismo.

Esteban Silva

No hay comentarios:

Publicar un comentario